La Ruta Nakasendo es un antiguo camino que conectaba las ciudades de Kyoto y Edo (hoy en día Tokio) durante el período Edo en Japón. Esta ruta es conocida por su belleza natural y por ser una de las más importantes del país en esa época.

Uno de los tramos más famosos de la Ruta Nakasendo es el que va de Magome a Tsumago, dos pueblos tradicionales que han conservado su aspecto original a lo largo de los años. Esta caminata de aproximadamente 8 kilómetros ofrece a los viajeros la oportunidad de adentrarse en la historia de Japón y disfrutar de paisajes impresionantes.

Magome es el punto de partida de la ruta y es conocido por sus calles empedradas y sus casas de madera tradicionales. Los viajeros pueden caminar por sus calles estrechas y empinadas, disfrutando de las tiendas de artesanías y de los restaurantes que ofrecen comida típica japonesa.

A lo largo del camino hacia Tsumago, los caminantes pueden disfrutar de los hermosos paisajes montañosos y de los bosques de bambú que rodean la ruta. También podrán ver antiguas postas de descanso y puentes de madera que han sido conservados a lo largo de los años.

Tsumago, por su parte, es un pueblo aún más rural y tradicional que Magome. Aquí los viajeros pueden disfrutar de casas de estilo japonés, templos antiguos y una tranquilidad que es difícil de encontrar en las grandes ciudades.

Al final del recorrido, los viajeros pueden relajarse en los baños termales de Tsumago y disfrutar de la comida local, que suele incluir platos como sopa de fideos soba y dulces tradicionales.

En resumen, la Ruta Nakasendo de Magome a Tsumago es una experiencia única que permite a los viajeros sumergirse en la historia y la cultura de Japón, mientras disfrutan de la belleza natural de la región. Esta caminata es una oportunidad perfecta para desconectar de la rutina diaria y conectar con lo auténtico de Japón. ¡Una experiencia imperdible para cualquier amante de los viajes!